La crisis del Covid-19 y el confinamiento de la población se ha cebado
con el sector de la dos ruedas, que ha visto paralizada su actividad y
pone en serio riesgo el 'fin de serie' de los modelos Euro4 de
emisiones, que por ley no podrá venderse desde el 31 de diciembre. Cerca
de 80.000 motos podrían quedarse en los almacenes sin venderse al
público. Anesdor, junto con el resto de patronales europeas, reclama una moratoria que saque de la agonía a concesionarios y marcas.
https://www.elmundo.es/motor/2020/05/26/5ecd3a3921efa073288b4572.html