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El frío domingo despierta entre nubes grises y la certeza de una jornada lluviosa y desapacible. En el corazón de los amantes de las motos, sin embargo, este clima es solo una invitación a desafiar los elementos y recorrer kilómetros sobre el asfalto mojado: Usansolo, Bedia. La adrenalina de desafiar las inclemencias meteorológicas se mezcla con la prudencia necesaria para mantenernos a salvo: Lemoa, Igorre. Hacemos la parada en Artea
El café caliente se convierte en un bálsamo para el frío la lluvia y el granizo. Con los ánimos reconfortados, continuamos la ruta: Pto de Bikotzgane, Orozko. El agua sigue cayendo implacable sobre el asfalto, formando charcos y convirtiendo cada curva en un desafío para el equilibrio sobre las dos ruedas Pto de Altube, Izarra, Pto de La Barrerilla, Orduña.
La pericia se pone a prueba en cada giro, cada frenada y cada acelerón. Tomamos la penúltima en Amurrio. El sonido de los neumáticos sobre el asfalto encharcado se convierte en la banda sonora del último tramo de esta ruta: Arrankudiaga, Miraballes, Bilbao.