El Lunes de Pascua, 2024, marcamos el final de un viaje emocionante que nos ha llevado a través de las sinuosas carreteras. Cinco días de aventuras preparadas meticulosamente por Aitor, que nos han permitido saborear la libertad del viento en nuestro rostro, el rugido de los motores y el paisaje en constante cambio bajo el cielo azul de la Semana Santa. Ha sido un viaje lleno de momentos inolvidables, donde hemos disfrutado del buen tiempo y nos hemos sumergido en la belleza de las curvas de la carretera.
Arrancamos
motores, en este Lunes de Pascua es nos llevó a las montañas: Amorebieta,
Durango, Mañaria, Pto de Urkiola, Otxandio, Pto de Dima, Lamindao. Las serpenteantes carreteras nos desafían
y maravillan a partes iguales. Los picos nevados se alzaban majestuosos en el horizonte. Hacemos la parada para el café en Artea. Sentados
en una terraza al sol. Luego continuamos: Pto de Bikotzgane, Orozko, Pto de Altube.
Las curvas cerradas nos mantuvieron alerta,
cada giro una nueva oportunidad para sentir la adrenalina correr por nuestras
venas: Pto de la Barrerilla, Orduña. Tomamos la penúltima en Amurrio y
regresamos a casa. Y ahora, en este último día de nuestras rutas de Semana
Santa, miramos hacia atrás con alegría y gratitud por los recuerdos que hemos
creado juntos. Han sido cinco días de pura magia, donde hemos compartido risas,
aventuras y amistad. Aitor, con su liderazgo y dedicación, ha hecho que cada
momento sea inolvidable, y por eso le estamos eternamente agradecidos.